MyRoT es el nombre del robot diseñado para ayudar a niños con autismo
Un grupo de investigadores ha compartido los hallazgos del proyecto que evalúa la eficacia del árbol robot MyRoT como una herramienta didáctica para mejorar la atención sostenida en niños con trastorno del espectro autista (TEA).
Financiado por la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt), el proyecto MyRoT consiste en un robot social con forma de árbol que incorpora una bocina y una pantalla de tableta. Esta innovación fue concebida en un proyecto anterior por Herminia Peña, bióloga y escritora, junto a su esposo, Leonel González, experto en automatización. Su objetivo era desarrollar una herramienta para apoyar el seguimiento y refuerzo de tareas en niños con TEA.
«Este es nuestro segundo proyecto con este equipo funcional», señaló Peña, quien es la investigadora principal. «Llevamos a cabo una investigación en el Instituto Panameño de Habilitación Especial (IPHE) de Betania, en la ciudad de Panamá. El estudio, aprobado por el comité de bioética de la Universidad de Panamá, incluía la introducción dinámica del robot social MyRoT a estudiantes de 5 a 12 años, en un entorno controlado, para evaluar sus reacciones», agregó.
En total, participaron 38 niños con autismo. Se dividieron en dos grupos: uno recibió terapia ocupacional de manera convencional, mientras que el grupo experimental recibió terapia a través de MyRoT.
«Los niños interactuaron con el robot árbol en un aula, siempre acompañados por un padre o asistente, nunca solos. El robot social era controlado a distancia por un psicólogo u otro especialista ubicado en otra sala. A través de la aplicación diseñada para el robot, el especialista hablaba y su voz se reproducía a través de la bocina del robot», explicó Peña.
María Heller, directora de la Dirección de Innovación en el Aprendizaje de la Senacyt, destacó que este proyecto surge de dos convocatorias de la Senacyt. El árbol y las tabletas se presentan como una vía de comunicación entre el terapeuta y las personas con autismo. Heller indicó que hasta ahora, esta propuesta ha arrojado resultados alentadores y se espera que su impacto aumente a medida que se desarrollen más aplicaciones y se amplíe su uso en diversas regiones de Panamá.
En el futuro, los creadores del robot MyRoT tienen previsto utilizar la Inteligencia Artificial para analizar el comportamiento de los niños. González plantea la necesidad de desarrollar una herramienta que permita un seguimiento más detallado de los niños, proponiendo el uso de telemetría a través de dispositivos como relojes inteligentes para recopilar información sobre su comportamiento y los estímulos que les afectan, entre otros aspectos relevantes.
Los científicos consideran que esta tecnología sería de gran utilidad tanto para terapeutas como para padres, actuando como un asistente virtual que acompaña el desarrollo de los niños.
